Escucho, luego aprendo

¿Quién crees que irá en ese avión? ¿Cuál será su historia? A menudo miro al cielo desde mi terraza y no puedo evitar que mi imaginación vuele con aquellos aviones que surcan el cielo cántabro ajenos a que una mujer cualquiera sueña con estar en su lugar. Ni siquiera pienso en que su situación puede ser mucho peor que la mía. Pero no pensamos en eso cuando no estamos a gusto.

Adoro este sitio, lo juro, pero hace tiempo acepté que no nací para quedarme aquí anclada. Tengo alas y he de usarlas. He nacido para marcar la diferencia. He de ser esa persona que, de forma anónima y completamente desinteresada, ayuda a entender la vida a los demás. Pero hasta que ese momento llegue, necesito comprenderla yo, y qué mejor manera para hacerlo que viajar. Y es ahora cuando lo tengo que hacer, porque quién sabe cuándo dejaré de poder hacerlo.

He aprendido tanto de las personas afines a mí, como de todas aquellas que representan lo contrario a quien soy. De las primeras aprendo a conocerme mejor, a entender por qué hay ciertas cosas que me motivan a luchar.

De las segundas aprendí a conocerme a mí misma y a los demás. Gracias a observar cómo actúan, o a escucharles durante largos ratos, esas personas iluminan, abren ventanas que otros no podrían haber abierto mostrándome una nueva y perfectamente válida forma de entender la vida. Esto no significa que vaya a cambiar quién soy para ser como ellos, porque no me gustan los cambios radicales. Yo sencillamente evoluciono. Más bien me ayuda a ver más allá llegando a lo bueno que todo ser humano guarda bajo cuatro llaves. Aprendo cada día a entender las frustraciones de los que me rodean, así como las razones de sus anhelos. Sin embargo, es un proceso lento y agotador que, según firmemente creo, solo terminará con mi último latido.

No te pienses que esto lo hace menos atractivo para mí. Es más bien al contrario. Cada persona que entra en mi vida para ponerlo todo patas arriba, me da un nuevo motivo para seguir creciendo.

3 comentarios sobre “Escucho, luego aprendo

Deja un comentario